Se trata de la consola de Valve que funciona sobre una derivación de Debian llamada SteamOS. Según parece, se empezará a vender este año.
Podría ser lo que impulse definitivamente a Linux en los PCs de casa. La tan trillada pregunta «¿será este el año de Linux en el escritorio?» podría ser respondida de una vez por todas de aquí a unos meses.
La Steam Machines es básicamente un PC con unas capacidades gráficas superiores a lo habitual, pensadas para jugar. Si tiene cierto éxito, los desarrolladores de software en general (más allá de los creadores de juegos), podría poner la mira en Linux como sistema sobre el que portar sus programas y eso podría convertir al sistema de GNU es una alternativa real para muchos usuarios que no encuentran el software que necesitan para el sistema libre.
Si después de la Steam Machines todo sigue igual, la pregunta habrá sido respondida de una vez por todas con un rotundo «probablemente eso no sucederá nunca». Hasta ahora ninguna compañía ha dedicado tantos recursos a sacar un conjunto de hardware y software que corra sobre Linux y cuyo fin sean los juegos.
La cuestión es si el público aceptará a esta peculiar consola que, dicho sea de paso, se puede fabricar uno mismo con componentes estándares. La principal novedad en cuanto al hardware es el innovador mando.
Después de varios meses de silencio y otros tantos haciendo pruebas al hardware y el softeare, se ha confirmado que Steam Machines verá la luz en el GDC (el Game Developers Conference) a principios de marzo de este año. El diseño del Steam Controller se da por finalizado y Steam OS parece estar lo suficientemente maduro como para entrar en producción. Por otra parte, son ya bastantes los ensambladores que han sacado su versión de la máquina.
En principio la Steam Machines tendrá un precio de en torno a $500, pero al ser un diseño tan abierto, habrá precios para todos los bolsillo proporcional a las especificaciones técnicas de la máquina.
Cabe destacar también que Microsoft decidió hace unos días que Windows 10 (que aparecerá a finales de este año), tendrá una edición freemium completamente gratuita, probablemente por el mercado robado por las tabletas y otras amenazas como esta.
En cualquier caso, los resultados de este proyecto todavía tardarán en llegar y si Linux se acaba convirtiendo en una alternativa real para absolutamente todos los ámbitos, está por ver.
Vía Not Operator.