En septiembre, el equipo de desarrollo de Debian decidió echarse atrás sobre abandonar Gnome como escritorio predeterminado. Ahora su objetivo es abandonar Gnome sólo para las arquitecturas de procesador diferentes a x86 tanto de 32 como de 64 bits.
Tal y como leemos en esta entrada de Phoronix, el equipo de desarrollo de Debian ha decidido aparatar a Gnome de plataformas como ARM. La razón es que Gnome Shell necesita un buen soporte OpenGL por parte de los controladores gráficos y las plataformas ARM no están lo suficientemente depuradas en este aspecto.
Así que para la próxima versión de Debian, tan solo tendremos Gnome en los PCs. La razón por la que se decidió dejar Gnome en en x86 fue principalmente por cuestiones de compatibilidad con systemd.
Por otra parte, hay una facción del equipo de Debian que no quieren seguir con systemd y ha estado habiendo cierto revuelo con el asunto (más). De momento no se sabe muy bien cómo acabará la cosa pero se oyen voces de una posible escisión de la distro sobre la que se crearía una fork sin systemd.
Desde el punto del vista del usuario, el gestor de demonios es indiferentes, pero de cara a los desarrolladores parece haber ciertos problemas insalvables.